Subscribe News Feed Subscribe Comments

lunes, 12 de octubre de 2009

¿Por qué la gente ya no se arregla para ir al teatro?

Técnicas...

Me invitó una amiga el viernes para ir a ver un musical, era el previo al estreno del musical de los 40 principales en la maravillosa Gran Vía de Madrid. Elegí un estilismo de noche, cuidado, con toque clásico y también intenté darle una pizca de elegancia, pues iba a ir al teatro y la ocasión lo merecía. Además siempre he tenido el recuerdo de arreglarme para ir al teatro, lo he recordado siempre como una de ésas ocasiones especiales en las que intentas ir lo mejor posible.
Y me encontré con todo lo contrario. La informalidad y la comodidad había podido frente a la ocasión especial. Estilismos mil, tanta variedad como os podáis imaginar. Desde ropa de deporte hasta algún señor con traje, aunque éstos eran los que menos abundaban. La gente se había vestido como para ir a tomar un café a las 15h, para ir a pasear con unos amigos, etc. En conclusión: Como en cualquier ocasión.

Con ésto no quiero decir que vistieran mal, todo lo contrario, había mucha gente muy informal y con un estilo muy definido , combinaciones muy conseguidas, etc. Pero sentía que no iban acordes ni con el lugar ni con la ocasión. El teatro Rialto con sus escaleras de mármol, sus sillones, sus arcos, etc...y... un chico bajando las escaleras con una camiseta de tirantes, un vaquero pitillo, y unas zapatillas. Sinceramente, no me casa el estilismo con el contexto.
Estamos viviendo una etapa en la que hemos ido rompiendo normas, en la que nos hemos ido liberando, tomando autonomía, teniendo voz y voto, ejerciéndolos. Aunque con ello en ciertas ocasiones hemos roto el equilibrio. La informalidad ha tomado el mando, y con ello ha roto ciertas costumbres y tradiciones que han desequilibrado la balanza.
Le comenté esto mismo a mi acompañante al teatro, y me dijo: “ Ya. Antes la gente se arreglaba muchísimo para ir al teatro, era como acudir a una cena muy especial. Pero yo por ejemplo he venido como visto siempre, porque me siento cómoda, es como suelo vestir siempre y como me siento bien.”

A lo que yo contesté: “ Hay pocas ocasiones en las que realmente te puedes vestir de manera muy especial sin estar ridículo o fuera de lugar. Una boda, una cena de primera cita, un cóctel de empresa, la ópera... El teatro es un punto añadido en el que puedes utilizar toda esa ropa, para el que puedes dedicar tiempo en arreglarte y en querer compartir con él toda su mágia. En fin, es una manera para no convertirlo en un día más.”

Yo no juzgo, ni quiero juzgar. Cada uno viste como quiere cuándo quiere. Pero hay ciertas costumbres que no se deben perder, porque forman parte de nuestra historia y costumbres, porque hacen especiales muchos momentos, y el arma para convertir un momento en especial es que sea diferente, único, bonito e irrepetible.

El teatro no es un cine. El teatro tiene arraigadas costumbres y tradiciones desde hace cientos de años. Es un sitio especial y por ello se merece que queramos ir con todos nuestros honores.


Un Chico Con Botas
 
El Chico Con Botas | TNB
Contatori per sitocontadores web